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Cómo vencer el “síndrome del impostor” y consolidar una marca al comunicarse con cooperantes y aliados

La proyección de una buena imagen es clave al momento de relacionarse con potenciales cooperantes y aliados y generar una marca organizacional. Sin embargo, hay organizaciones de impacto que padecen el “síndrome del impostor” y sufren dificultades en su propósito de gestionar recursos de cooperación internacional y alianzas porque no proyectan al mundo todo el potencial que tienen, o simplemente porque no saben hacerlo. 

En este artículo te compartimos algunas estrategias y recomendaciones para la consolidación de la marca organizacional al conectar con cooperantes o aliados, compartidas por Catalina Escobar y Valentina Osorio durante el Taller Estrategias de comunicación y visibilidad para organizaciones, en el marco de TICSO 2023.

Marca personal vs Marca Organizacional 

De acuerdo con Catalina Escobar, directora de estrategia de Makaia, lo primero que hay que tener en cuenta es que la marca personal afecta (positiva o negativamente) a la marca organizacional. Es prácticamente imposible separarlas. Independiente del canal de comunicación utilizado, ya sea un sitio web, correo electrónico o redes sociales; finalmente quienes producen el contenido, escriben el correo electrónico, participan en un evento público o quienes dan la cara en una reunión para establecer alianzas en nombre de una organización son personas.  

Siempre partir de que ya tenemos un “No” y hay que ir por el “Sí” 

El “síndrome del impostor” hace referencia a esa voz en el fondo que no le permite a las organizaciones contactar directamente con socios potenciales o cooperantes, porque no van a recibir respuesta a su comunicación, porque la forma en que lo harán no será la adecuada, porque hay otras que lo hacen mejor, o simplemente porque se tiene el imaginario que el cooperante es jerárquicamente superior y no se relacionará con una organización que “no esté a su nivel”. Sin embargo, para el cooperante las organizaciones de impacto son contrapartes iguales, son justamente las mismas organizaciones de impacto quienes muchas veces crean las diferencias o límites. Actualmente la cooperación es más horizontal a diferencia de hace muchos años, pues en las organizaciones cooperantes también trabajan seres humanos, hay oportunidades de contacto y necesidades al igual que en cualquier otra organización y justo ahí, cobran valor las alianzas.  

Para vencer ese temor o sentimiento de inferioridad en las organizaciones de impacto, una estrategia que la experta de Marca Personal Valentina Osorio sugiere implementar es la del Empoderamiento, entendido como “En poder no miento” para explicar que, si los miembros de una organización no confían en el poder o capacidad que tienen como seres humanos de conectar o comunicar de manera efectiva su marca, necesidad o propósito a un cooperante, es mejor dedicarse a otra cosa. En este punto, es importante consolidar la identidad de la organización, es decir, tener claro el propósito y la visión, adoptar unos valores y luego confiarlos y encomendarlos al equipo que la conforma. Es decir, hay que “empoderarse” desde la perspectiva de Valentina Osorio, porque un equipo organizacional exitoso que tiene poder y no miente, tiene claro quién es, qué tiene y qué quiere lograr. 

No obstante, hay que tener presente que el relacionamiento directo es un asunto de largo aliento que requiere constancia. No todo llega de inmediato, pero si nos enfocamos y las buscamos, las oportunidades llegan. Por lo tanto, hay disfrutar y aprender en el proceso, quedarse con los logros por muy pequeños que sean como motivación para lograr el éxito. Después de varios no, seguramente llegará un sí. Porque no nacemos con las posibilidades dadas, hay que ir a buscarlas.  

Si estas en una transmisión, comunicación o aparición virtual, prende la cámara siempre. 

Encender la cámara para desarrollar una reunión virtual podría entenderse como un asunto de sentido común a la hora de conectar con un potencial aliado o cooperante, pero en Latinoamérica (Exceptuando países como Nicaragua o Venezuela, por seguridad), ignoran o le restan importancia a un detalle clave como este. Si en nombre de mi organización yo no quiero, permito o deseo que me vean la cara, ¿De qué manera entonces voy a conectar? ¿Cómo voy a permitir que el donante confíe en mí? Hay que encender y mantener encendida la cámara, independiente que vaya a reunirme en la noche o madrugada con un donante que está al otro lado del mundo. Como representante de la organización para la que trabajo me debo programar para el éxito, vestir para el éxito y comunicar para el éxito, porque como puntualiza Valentina Osorio, “Estar en piyama ya es estar sin poder”. En tal sentido, algunas recomendaciones son: 1) Al encender tu cámara que lo primero que se vea sea tu cara y no cualquier otra parte del cuerpo que deje en evidencia que apenas te estas alistando. 2) Que tus manos estén visibles y el rostro despejado. 3) Que la luz venga frente a ti y no a contraluz, pues si apareces en oscuro prácticamente no existes. 4) Que la forma de vestir vaya acorde a lo que quiero comunicar o reflejar. Hay que ser coherentes y consecuentes. 5) Ser positivos, empáticos y concretos al comunicarse. Se sugiere hablar con buena entonación y cuidar aspectos de ortografía, acentuación y puntuación al escribir. 6) Siempre dar una revisada antes de enviar un correo para corregir cualquier error.  

 

En conclusión, es posible vencer el síndrome del impostor en las organizaciones de impacto y crear confianza en la marca organizacional al momento de contactar cooperantes y aliados. Es cuestión de tener la determinación para vencer el temor y empoderar a los equipos mediante la apropiación de la identidad institucional. Esto debe ir acompañado del entendimiento y aplicabilidad de los preceptos de marca personal al ámbito organizacional por parte de los miembros del equipo cuándo buscan establecer relacionamiento en nombre de las organizaciones, ya sea presencial o virtualmente. Adicionalmente, las organizaciones de impacto deben apropiar la perseverancia como una característica clave en el ámbito de la gestión de oportunidades de manera similar a las personas que han logrado el éxito con sacrificio y constancia en el deporte o cualquier otra industria, pues el poder está en las manos de quien así lo cree.

Indicadores

Impacto Social
Autor
anuarhernandez
Regiones de Impacto

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